28 de Noviembre 791
Habían pasado algunas semanas desde nuestra
visita a la montaña Paos, y como era de esperarse Trunks y Goten se estaban
impacientando con nuestro encuentro antes pactado; por fortuna el padre de
Bulma había estado tan diligente como siempre y ya había terminado de preparar
el lugar para nuestro combate. Se trataba de una gigantesca bodega propiedad de
la corporación capsula que había ordenado vaciar para nuestro uso, se
encontraba varios kilómetros fuera de la ciudad y estaba reforzada para
soportar explosiones de gran magnitud; de acuerdo con el Dr. Briefs este era el
lugar donde se llevaban a cabo las pruebas de sus experimentos más riesgosos.
-
La he
acondicionado con todo lo necesario para nuestro uso – explico mi suegro
mientras recorríamos la enorme estructura – he instalado cámaras de alta
velocidad en diversos ángulos para capturar tanta información visual como sea
posible, también coloque sensores térmicos y de corriente eléctrica, así como
también celdas fotovoltaicas, me da mucha curiosidad saber cuánta luminosidad
pueden desplegar los súper saiyajin.
-
… - Trunks
y Goten asintieron como si estuvieran entendiendo de lo que hablaba su abuelo,
yo mismo apenas entendía la mitad de lo que había explicado y eso que no era la
primera vez que participaba en sus experimentos.
-
Es muy
grande – le dije al Dr. Briefs – pero a pesar de su tamaño no es tan alta como
para volar con completa libertad.
-
Me temo
que es lo más grande que tengo Vegeta.
-
Nos
adaptaremos… ¡Trunks! ¡Goten! – llame a los niños llamando su atención – escúchenme
con atención, pelearemos en el suelo, tienen prohibido volar.
-
¡Pero
papa! – replico Trunks.
-
¡No hay
pero que valga! Si pueden pelear en el aire pueden hacerlo igual en la tierra.
A regañadientes, los niños aceptaron la
condición. El padre de Bulma nos colocaría además unos monitores de signos
vitales en la nuca, donde sería menos probable que los dañasemos. Luego de
calentar un poco y de que mi suegro fuera a su cabina de control nos preparamos
para el combate.
-
Muy bien
niños… Muéstrenme de lo que son capaces.
-
¡FUUUUU…SION!
¡HAAAA! – exclamaron los pequeños al unísono mientras ejecutaban las ridículas
poses de la danza para fusionarse; al tocarse las puntas de sus dedos un
estallido de luz los envolvió y donde estaban los dos niños solo quedo uno, su
cabello negro y con franjas lilas a los lados estaba erizado, su cuerpo era un
poco más musculoso que el de Goten o el de Trunks y vestía de forma muy estrafalaria
- ¡Taran! ¡El gran Gotenks entra a escena! – anuncio con una doble voz.
-
Dime una
cosa Gotenks ¿qué le paso a tu ropa? – le pregunte.
-
¿A qué te
refieres papa? Así es como me visto siempre – la manera en la que respondió me
indico que a pesar de ser un ente completamente nuevo, se reconocía así mismo
como mi hijo y probablemente también como hijo de Kakarotto, era un poco distinto
a como yo había experimentado la fusión con él.
-
Cuando
Kakarotto y yo nos fusionamos nuestra ropa era una combinación de lo que ambos
vestíamos en ese momento, pero tu vistes completamente distinto de Goten y
Trunks – les explique.
-
¿Eh? –
Gotenks se miró las manos y el resto del cuerpo examinando su atuendo - ¿en
serio? ¡No me había dado cuenta! Ja ja ja – no sabía si eso era porque Gotenks
era muy despistado o simplemente su existencia tan breve no priorizaba cosas
como su vestimenta.
-
No
importa… ¡Aquí voy! – le advertí lanzándome al ataque.
-
¡ESPERA! –
pidió efusivamente haciendo una seña con las manos para que me detuviera.
-
¡¿A qué
demonios quieres que espere?! ¿No se supone que tu fusión solo dura 30 minutos?
-
Tchi Tchi
Tchi… - Gotenks sonrió pretenciosamente mientras negaba con un dedo – precisamente
por eso debes esperar, aun no has visto todo el poder del fabuloso Gotenks…
ahora me transformare en súper saiyajin.
Gotenks alzo sus puños al aire y luego contrajo
sus músculos para convertirse en súper saiyajin al expulsar su ki, de inmediato
pude sentir el incremento en su poder, pero aún seguía por debajo del mío.
-
Aun no has
visto nada – dijo antes de que pudiese retomar mi ataque.
Con un grito comenzó a incrementar su
energía y de repente su cabello comenzó
a crecer dándole el aspecto del súper saiyajin fase tres que ya me era tan
familiar tras haberlo visto en Kakarotto, su cuerpo estaba envuelto por
pequeños relámpagos y sus cejas habían desaparecido, transformándose en
grotescos pómulos; y aunque su musculatura había crecido y se había vuelto más
definida, debido a su corta estatura se veía como un enano malvado.
-
Ya veo… así
que ¿esa es tu transformación de súper saiyajin 3? – le pregunte retóricamente.
-
Te deje
sorprendido ¿verdad? Ahora veras de lo que soy capaz… ¡a pelear!
Dicho esto se lanzó al ataque con tal velocidad
que apenas alcance a bloquear el puñetazo que me lanzo a la cara cubriéndome al
cruzar ambos brazos para defenderme, pero aun así pude sentir la fuerza del
impacto, eso iba dejar un moretón más tarde. Gotenks sonrió con malicia y dio
una voltereta en el aire para tratar de quedar a mis espaldas, me gire al
tiempo que me tiraba una patada a la nuca y le sujete la pierna con mi mano
izquierda.
-
Que
predecible – le dije sonriéndole esta vez yo.
La expresión confiada de Gotenks desapareció al
atraparlo y no le di tiempo de hacer otra cosa, lo arroje en la dirección de
donde había venido originalmente y le perseguí mientras volaba sin control;
cuando lo alcance, puse mis manos en su pecho y dispare una onda de ki sin
volverla incandescente, de esta manera no haría más que sofocarlo. Pero para
mi sorpresa Gotenks me sujeto a mi esta
vez de ambos brazos, alzándolos para desviar mi ataque, acto seguido me dio un
punta pie en el estómago con ambas piernas que hizo que mi espalda se arqueara,
en ese momento me soltó de los brazos, dejando que la fuerza de su patada me
elevase en el aire aún más. Entonces el niño realizo su siguiente movimiento;
concentrando su ki en la punta de su dedo índice lo solidifico en la forma de
un gran anillo de luz que luego me arrojo.
-
¡Recibe!...
¡El Galactic Doughnut Attack! – exclamó.
La “dona” de luz salió disparada y a la orden
del niño esta se expandió a mi alrededor, cuando comenzó a cerrarse lo sujete
con ambas manos lo doble como si de
acero se tratase, retorciéndolo hasta que se hizo pedazos.
-
Buen
intento mocoso… pero es una técnica aún
muy rudimentaria – volvi a colocarme a su altura a tan solo unos metros de
distancia de él.
-
¡No puedo
creerlo! Majin Boo no pudo escapar de mi técnica cuando la use transformado en súper
saiyajin 3 y era más fuerte que tu… ¿Cómo lo hiciste?
-
¡Tonto!
Majin Boo era muy fuerte, pero cuando peleaste con él no era un gran peleador,
no fue sino hasta que los absorbió a Piccoro, Gohan y tú que se volvió un
guerrero apto. Su invulnerabilidad era lo que lo hacía tan peligroso.
-
¿A si?...
pues ahora te mostrare algo que si le hizo daño a Majin Boo… - el niño inhalo
profundamente y luego soplo diez bolas de masa etérea que adoptaron la forma de
el mismo - ¡El Ataque Kamikaze de los Súper
Fantasmas! ¡Ataquen!
Gotenks me señalo con un dedo y los diez
fantasmas surcaron el aire rodeándome en todas direcciones. Los fantasmagóricos
niños reían malévolamente, pero antes de que pudiesen hacer algo, lance ráfagas
de energía contra todos ellos haciéndolos explotar en su lugar, la bóveda se llenó
con las atronadoras explosiones y el humo cubrió todo el lugar, entonces hice
mi movimiento. Lanzándome contra Gotenks tomándolo por sorpresa completamente;
se quedó boquiabierto con los ojos clavados en los míos de tal manera que pude
verme reflejado en ellos. Le sonreí triunfalmente y lo golpee con fuerza en el estómago.
Los ojos del niño casi se salen de sus orbitas al mismo tiempo que el aire
abandonaba sus pulmones, su transformación de súper saiyajin 3 se deshizo
convirtiendo su melena en chispas de color dorado y luego su cabello rubio se apagó
volviendo a su bicolor normal. Gotenks cayó sobre sus rodillas y quedo inconsciente,
lo sujete antes de que callera de cara al suelo y lo deposite suavemente boca
abajo.
-
¡Creo que
ya fue suficiente por hoy Dr. Briefs! – grite para indicarle a mi suegro que
habíamos terminado.
-
¡Entendido
Vegeta! – respondió el padre de Bulma a través de los altavoces colocados en la
bodega.
Me incline para tomar a Gotenks en mis brazos,
pero entonces su cuerpo brillo por un momento y se separó volviendo a formar a
Trunks y Goten, ambos estaban inconscientes. Los levante a ambos y me los eche
al hombro para luego salir de la bodega. El Dr. Briefs y yo los colocamos en
unas camillas para que descansaran, él se hizo cargo de Goten y yo de mi hijo;
una vez que lo recosté lo mire por un momento para examinar su rostro. Aun
tenia las facciones infantiles propias de su edad, pero ahora se había vuelto
mucho más fuerte, me pregunte por un momento si mi padre alguna vez me miro
mientras estaba en mi capsula de incubación y se preguntó qué tan fuerte
llegaría a ser… aunque posiblemente ya lo sabía, el poder de nosotros los
saiyajin era analizado en cuanto nacíamos, ¿Qué diría mi padre si me viera
ahora? Posiblemente se burlaría. Acaricie el cabello de mi hijo dándome cuenta
de lo muy diferente que me había vuelto a mi padre; y pensar que no hace mucho
había esperado a estar a punto de morir para hacer algo como esto,
definitivamente algo de mi murió ese día y no volvió a la vida junto conmigo y
me alegraba que así fuera.
-
Ha crecido
mucho ¿verdad? Los dos lo han hecho – dijo la voz del padre de Bulma haciéndome
recordar que no estaba solo.
-
¡Ah! Bu,
bueno si… - respondí avergonzado tratando inútilmente de sonar natural –pero aún
les falta mucho por mejorar.
-
… - mi
suegro sonrió alegremente como diciendo “descuida
no se lo diré a nadie” – seguro que lo harán… ¿quieres ver los datos que
recopile?
-
¡Sí!
Salimos de la pequeña habitación que tenía el
padre de Bulma preparada con quipo medico en caso de que fuera necesario
dejando a los niños ahí dormidos. Luego nos encaminamos hacia la cabina de
control donde un montón de aparatos electrónicos seguían aún procesando
información. El Dr. Briefs presiono un botón y un montón de hojas comenzaron a
ser impresas; mientras estuvo eso listo me invito a sentarme y sirvió dos tazas
de café.
-
Estos son
tus signos vitales y los de Gotenks, la verdad es que cuando empecé mi análisis
esperaba toparme con que tendría dos corazones o algo así, pero su anatomía es
completamente normal, al menos lo normal para un saiyajin claro está.
-
Ciertamente
uno no sabría que esperar con una fusión, es una experiencia muy extraña.
-
Si… de lo
que si encontré duplicados fueron de las cuerdas bucales, Gotenks tiene cuatro
pares en lugar de 2 como tú y yo, al parecer es lo que causa su doble voz… Es
una lástima que no hubiese tenido la oportunidad de examinar a Vegetto.
-
Afortunadamente,
no se imagina el incordio que fue estar fusionado con ese tonto, aun al día de
hoy tengo rastros de sus recuerdos en mi cabeza.
-
¡…! – los
ojos del Dr. Briefs brillaron con interés por un segundo – fascinante, entonces
en efecto hay un intercambio neurológico entre los sujetos durante la fusión.
Dime ¿son recuerdos claros? ¿pensamientos vagos que quedaron en tu subconsciente?
¿mantienes una conexión mental con Goku?
-
… - La
emoción de mi suegro crecía con cada pregunta, así como mi incomodidad al tener
mi mente sondeada de manera tan profunda – La verdad es que no tengo recuerdos
por así decirlo, más bien conocimiento general, no es como si hubiese aprendido
sus técnicas o algo por el estilo, pero por ejemplo se sobre Gotenks y los
supremos Kaio sama.
-
En fin… seguramente
te estarás preguntando acerca de la transformación en súper saiyajin tres ¿o
no?
-
No
realmente – respondí sorprendiendo al padre de Bulma – cuando Kakarotto peleo
contra el Majin Boo niño pude apreciar muy bien las capacidades de esa
transformación, y ahora que pelee con Gotenks creo que la entiendo un poco
mejor.
-
¿En serio?
Pues a mí me pareció fascinante desde un punto de vista científico.
El padre de Bulma comenzó a mostrarme distintos
diagramas que mostraban las diferencias del metabolismo de Gotenks en su forma
base, en súper saiyajin y en súper saiyajin fase tres. La principal diferencia
con esta última era que los cambios físicos se debían a la fisiología única de
los saiyajin y su capacidad de transformarse en monos gigantes, cuando Gotenks
iniciaba la transformación, había un estímulo en las terminaciones nerviosas de
la cola, al estar ausente como en el caso de Kakarotto Gotenks y mío, el estímulo
era enviado de vuelta al cerebro, el cual trataba de iniciar la transformación,
al no contar con los medios necesarios, provocaba el crecimiento repentino del
cabello y deformaba ligeramente el rostro, de ahí que desaparecieran la cejas y
la expresión se volviera más agresiva, o como Gotenks lo diría, te ponía “cara
de malo”. Al hacer esto la fuerza física y la capacidad para emitir energía
aumentaba en gran manera, sin embargo el esfuerzo de mantener esta
transformación era extenuante para el cuerpo, drenando rápidamente sus reservas
de energía.
-
Sin duda
la ganancia de poder es sustancial en un corto tiempo – le comente a mi suegro –
pero si no se puede acabar con el oponente rápidamente como fue el caso de
Majin Boo, esa transformación te deja vulnerable.
-
En eso
tienes razón… lo que me intriga es ¿qué pasaría si se intentase esa transformación
teniendo cola?
-
… - la
pregunta quedo flotando en el aire sin respuesta, en ese momento Trunks, quien había
despertado entro a la cabina.
-
¿Papa?... –
pregunto mi hijo aun somnoliento - ¿Qué fue lo que paso?
-
Solo
digamos… que aún les falta mucho por entrenar.
-
¡AY NO
PUEDE SER! ¡¿Cómo fue que nos venciste aun transformados en súper saiyajin tres?!
-
¡Ja! Como si
un truco barato como ese fuera suficiente para derrotar al príncipe de los
saiyajin.
Mientras mi hijo aun renegaba por haber
perdido, Goten entro a la cabina siguiendo el ruido de nuestra platica.
-
Oigan,
tengo hambre ¿a qué hora vamos a comer? – pregunto la versión miniatura de
Kakarotto.
-
¿Pero que estás
diciendo Goten? ¿Cómo puedes pensar en comer cuando mi papa nos derroto tan fácilmente?
-
¡¿En serio?!
– pregunto Goten completamente azorado.
-
Creo que
es buena idea – intervino el padre de Bulma – ¿qué les parece si vamos por unas
hamburguesas?
-
¡Viva! –
vitoreo Goten – Yo quiero la mía con tocino.
-
Bueno, ya
que insistes abuelo aceptare tu oferta… - explico Trunks disimulando su
gratitud, no cabía duda que era algo heredado de mí.
-
Sera mejor
que vayamos por Bulma y su madre – le dije a mi suegro – no quiero que no echen
en cara el no llevarlas con nosotros.
-
Jo j ojo,
tienes toda la razón Vegeta – respondió.
Trunks y Goten pasaron varios años intentando
que les diera la revancha del el encuentro de ese día, pero eventualmente
perdieron el interés. Mi hijo no es un gran peleador pero tiene una mente
brillante y Goten… pues es Goten, para bien o para mal se parece mucho a su
padre.
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