3 de Agosto 791 4:50pm
-
Ca, ca, ¡¿casarse?! – pregunte entre
balbuceos a la madre de Bulma.
-
Así es. – respondió con una
sonrisa.
Cuando recién comencé a vivir en la tierra ignoraba
por completo de esta costumbre terrícola, pero tras poco tiempo supe de que se
trataba; sin embargo siempre lo había visto como una tontería de los humanos.
Pero ahora, esa mujer me estaba diciendo que la causa del extraño
comportamiento de Bulma era su deseo por contraer matrimonio. Algo dentro de mí
me advertía que no iba a ser algo agradable resolver esto.
-
Vegeta, ¿Por qué no se lo pides? –
pregunto amablemente.
-
¡¿Preguntarle qué?! – conocía de
antemano la respuesta a mi propia pregunta.
-
Pedirle que se case contigo… es
algo muy sencillo, pero te aseguro que tendrá mucho valor para ella.
-
… - sentía como si el suelo bajo
mis pies se resquebrajara ante tan absurda petición – de ninguna manera, no
tengo ningún motivo para hacer algo hace.
-
Sabes que eso no es cierto Vegeta –
declaro tranquilamente.
Era cierto. Yo mismo acababa de admitir que la
amaba, esa para cualquier persona en este planeta debería ser razón suficiente
para hacerlo. Pero era algo tan ajeno a mi persona que simplemente se sentía mal
de solo pensarlo. Pero aun así decidí por esa ocasión dar mi brazo a torcer.
-
¡Bah! Está bien… se lo pediré en
cuanto vuelva del trabajo esta noche – espete aceptado.
-
¡Oh no Vegeta! No puedes simplemente
decírselo de esa manera. Para una mujer es uno de los momento más importantes
de su vida. Tienes – y aún recuerdo el énfasis que puso en “tienes” – que hacerlo
especial.
-
¡Ay no diga tonterías! ¡¿A caso
espera que me declare con anillo y toda la cosa?!
-
Por supuesto que sí.
-
¡Un príncipe de los saiyajin no
puede hacer esas cursilerías!
Las escenas de todas las películas románticas que
Bulma me obligo a ver con ella se proyectaron en mi cabeza y sin darme cuenta
me esta imaginando a mismo como el protagonista de todas esas tonterías.
-
Con mayor razón, un príncipe debe declarársele
a su princesa como tal jo jo jo – algo que esa risita era más de burla que de júbilo.
-
¡Argh está bien! – dije levantándome
de mi sillón – iré al centro comercial a comprar el dichoso anillo.
-
Espera Vegeta – me detuvo antes de
que pudiera dar dos pasos hacia la puerta.
-
Ahora ¿Qué?
-
Creo que sería un bonito detalle si no usas tu
tarjeta de crédito para comprarlo.
-
Llegare entonces a un cajero automático
a sacar el efectivo.
-
No, me refiero a que lo compres
con tu propio dinero
-
… - Mi cara debió revelar mi confusión
porque continúo al momento.
-
Trabajando.
Estuve a punto de replicar de manera
explosiva, pero antes de que pudiera hacerlo saco del bolsillo de su delantal
unas hojas de papel.
-
Aquí tienes, le pedí a mi marido
que te consiguiera unos empleos de medio tiempo. No te preocupes, pagan muy
bien, así que con solo una semana podrás conseguir lo suficiente para comprar
el anillo.
Me quede sin palabras. Entre esa sonrisa
permanente y esa apacibilidad estoica, esta mujer me había acorralado de forma
incomparable. Tome las hojas y tras darles una leída rápida me di cuenta de que
todas tenían horarios para esta semana, así como las direcciones para cada
trabajo, me resigne y acepte lo que se me venía encima.
-
Oiga – me gire para mirarle antes
de salir de la biblioteca.
-
¿Sí?
-
¿A qué se dedicaba antes de estar
casada?
-
Era Psicóloga.
Voy a salir a dar una vuelta, pero creo que
continuare escribiendo hasta mañana. Ire a beber un trago al bar de Mike.
7 comentarios:
Jajajajajaja Coño!!! Como me he divertido con este capítulo!!! XDDD
Si que le queda lo de ser psicóloga a la mama de bulma 😝
Que no lo manden a construir algo, se calienta y explota la fábrica!! XD
jajajaja ya ni goku! jajaja ese vegeta, lo que se hace por amor
ni siquiera el principe de lod sayayin es inmune
jaja lo quiero :3
oiie ke imaginacion mas genial jjejeje ya kiero ver la boda buen trabajo sigue asi :)
Quisiera tener un trabajo de medio tiempo que, con sólo una semana, ya tuviera para comprarme un anillo... sigh!
Hahahahahahahahahaha esta perfecta esa entrada y muy divertida
Publicar un comentario