10 de Julio 791 5:00pm
Me tomo unos segundos recuperar el hilo de lo
que había ocurrido. Cell había demostrado ser mucho mas poderoso que yo con su
cuerpo perfeccionado.
-
¿Qué?... el ki de Trunks se ha
hecho pequeño, pero si no ha pasado mucho tiempo… - comenzó a decir Krillin
para si mismo – no entiendo que fue lo que sucedió ¿Por qué no se incrementa?
En cambio el ki de Cell se esta incrementando ¿Cómo puede ser? ¿acaso lo habrá
derrotado?... no eso no es posible el me prometió que lo vencería.
-
¡Gah! maldición ¡me las va a
pagar!
-
Oye, espera ¿que vas a hacer?
-
Solamente tengo un objetivo…
acabar con Cell
-
No, espera Veget-
-
¡Cállate!
Me dispare en dirección a la batalla
rápidamente. Tal y como Krillin había dicho el ki de Trunks disminuía mientras
que el de Cell continuaba elevándose. A juzgar por las banas esperanzas del
calvo, mi hijo estaba tratando de vencerle; el muy insensato estaba a punto de
suicidarse, si yo no pude eliminarlo el no tenia la mas mínima oportunidad.
Probablemente estaba confiado en sus habilidades, su entrenamiento en la
habitación del tiempo lo había fortalecido, quizá incluso estaría pensando en
aumentar su masa muscular como me vio hacerlo mientras peleábamos; pero a
diferencia mía Trunks carecia de la pericia de un guerrero experimentado para
identificar el equilibrio al aplicar dicha transformación. Al aumentar el
volumen de los músculos la fuerza aumenta considerablemente, pero pasado cierto
punto, la elasticidad de las fibras se atrofia, lo que da como resultado un
ligero engarrota miento, que si bien no evita que uno pueda moverse, limita la
velocidad del cuerpo. Mis pensamientos viajaban por mi mente mas rapido de lo
que volaba, pero eso no me impidió percatarme de que el ki de Cell se alejaba;
de pronto un estallido de energía broto de la isla donde el monstruo y yo
combatimos y un resplandor dorado pinto los cielos momentáneamente, era Trunks.
Cuando todo volvió a la normalidad estaba
postrado de rodillas y manos con la vista clavada en el suelo – Valla, que
alivio Trunks aun sigue con vida, pero no entiendo, que fue lo que sucedió ¿A
dónde se fue Cell? – dijo Krillin al llagar por detrás mio. Descendí mientras él
se quedo balbuceando y pise tierra cerca de mi hijo
-
Papa – su mirada parecía perdida
mientras su cabello dorado se tornaba lila al perder la transformación.
-
¿Qué paso con Cell? – me limite a
preguntar dándole la espalda.
-
No le gane… ¡No pude ganarle! – su
voz se escuchaba llena de frustración y remordimiento, un sensación que yo
conocía bien.
-
Trunks, explícame que fue lo que
paso – le pidió Krillin mientras le ayudaba a ponerse de pie.
-
Lo lamento, no pude hacer nada
para detenerlo.
-
Hum, eso es natural, un insecto
como tu jamás podría ganarle a Cell, mucho menos ahora que ha perfeccionado su
cuerpo.
-
¡Te equivocas Vegeta! ¡por si no
lo sabias Trunks pudo supera-¡
-
¡No Krillin aguarda!
Trunks le impero que guardara silencio y este
acepto asintiendo levemente. Sabia muy bien que era lo que trataba de hacer,
seguramente pensaba que había superado mis poderes y muy posiblemente en fuerza
física podría liberar mas potencia que yo por su complexión; pero su
experiencia y el control que tenia de su ki distaban mucho de mi nivel. Ahí
estaba nuevamente, la amabilidad de mi hijo tratando de poner a su padre por
delante, era vergonzosa su falta de orgullo.
-
¿Por qué Cell no te aniquilo? – le
pregunte.
-
Me, me dijo que no tenia caso
hacerlo, me pregunto como habíamos aumentado nuestros poderes tan rápidamente.
-
¿Le hablaste sobre la habitación
del tiempo? – pregunto Krillin con cierto temor
-
No, solo le dije que también Goku
se encontraba fortaleciéndose en estos momentos.
-
Bah, como si eso fuera a hacer
alguna diferencia.
-
La hizo – Replico el chico
recuperando su temple por un momento.
-
¿A que te refieres? – le inquirí.
-
Cell se entusiasmo con la idea de
que Goku… no, de que todos pudiéramos hacernos mas fuertes, por lo que decidió
hacer un torneo de artes marciales.
-
¿Un torneo de artes marciales?
Trunks explico brevemente el plan de Cell y
afirmo que participaría en dicho torneo. Para mi esto no era más que una burla
por parte de ese monstruo, pero me daría la oportunidad de entrenar en esa
habitación nuevamente y así poder clamar mi venganza. Por supuesto, Trunks pretendió
unírseme, pero lo rechace de inmediato, no iba a dejar me estorbase nuevamente.
Yo no necesitaba de Kakarotto ni de nadie más para acabar con Cell.
-
Yo también… - interrumpió una voz
ronca y quebradiza - … participare en ese torneo.
-
Era el androide No. 16, sorprendente mente
seguía de pie, Trunks inmediatamente se puso a la defensiva, sobre todo cuando
le solicito que le llevara a la corporación capsula para que Bulma le reparara.
Como era de esperarse, él se negó, pero Krillin logro convencerle de aceptar
ayudarlo. El cansancio comenzaba a acumularse en mi cuerpo, el haber ejecutado
el resplandor final empezaba a pasarme la factura, puse mi concentración en que
mis piernas no temblaran y luego me eleve para volar rumbo a casa; según mis
cálculos aun faltaban varias horas antes de que Kakarotto y su hijo salieran de
la habitación del tiempo, por lo que decidí que lo mejor seria descansar un
poco antes de volver a entrenar. Tome velocidad seguido de Trunks y Krillin que
cargaba con ese androide chatarra, mientras que en mi cabeza solo había lugar
para la imagen de Kakarotto entrenando en esa endemoniada habiacion y mi férrea
voluntad que se negaba a rendirse ante el.
Tomo solo 2 horas llegar a la corporación capsula,
a pesar de eso la diferencia de horario hacia que ahí siguiera siendo medio día;
desde que todo este embrollo comenzó los días se me estaban haciendo muy
largos, moverse de un lado a otro del planeta a velocidades supersónicas esta
mermando mi fuerza. Definitivamente requería un descanso, no creo haber pasado
tanto tiempo viajando desde que estuve en Namekusei, y me tomo una semana de
siestas recuperarme de ello. Aterrizamos en el jardín, donde la madre de Bulma
estaba regando sus flores.
-
Oh, hola Vegeta, ¿Cómo estas? Cuanto
tiempo sin vernos – Saludo con su permanente sonrisa.
-
…
-
Ay y sigues siempre tan encantador…
-
…
-
Ah, y también el joven que viene
contigo se ve muy guapo – dijo mientras se acercaba a Trunks – Supongo que eres
amigo del apuesto Vegeta.
-
Eh, hola, mucho gusto en conocerla
– ahora que recordaba esta era la primera vez que veía a su abuela, seguramente
eso lo ponía nervioso.
-
Disculpe – interrumpió Krillin que
aterrizaba en ese momento – necesito saber si se encuentra Bulma.
-
¿Quien?, ah hola.
-
¡Hola Krillin! – saludo el Dr.
Briefs que llegaba pedaleando una bicicleta- Bulma acaba de llamarme y dijo que
viene en camino, ¿Por qué no la esperas?
-
¿Todavía no regresa del templo
sagrado de Kami Sama?
-
¡HOOOLA! – saludo una voz por
encima de nuestras cabezas.
Era el anciano maestro de Kakarotto junto con
su esposa y las demás sabandijas, al parecer Bulma también les había llamado pidiéndoles
que se reunieran aquí. El lugar comenzaba a llenarse demasiado para mi gusto,
por lo que decidí ir a la cocina para comer algo. Mientras tanto el padre de
Bulma se llevo al No. 16 para hacerle un chequeo y los demás se quedaron
intercambiando saludos. Ya en laboratorio Trunks les explico a los demás acerca
del torneo de Cell, los muy idiotas inmediatamente decidieron participar, sobre
todo esa basura de Yamcha, parecía no entender que su nivel era muy distinto al
nuestro, incluso Krillin tenia un poder de pelea mas alto que el suyo. Al
llegar la noche Bulma aun no había regresado, por lo que descanse lo mas que
pude hasta la mañana siguiente.
Al despertarme la mañana ya estaba ajetreada;
al parecer todos se habían quedado esa noche, por lo que la casa estaba a
rebosar de voces. Eran cerca de las seis de la mañana y todo mundo parecía estar
despierto; después de asearme y vestirme baje al comedor para desayunar, donde
para mi desagrado el maestro Roshi y ese puerco humanoide estaban comiendo
junto con la esposa de Kakarotto por lo que fui directo a la cocina.
-
Ah, muy buenos días Vegeta – me saludo
la madre de Bulma tan sonriente como siempre.
-
… -con el paso del tiempo había aprendido
que la mejor manera de lidiar con ella era no seguirle la conversación.
-
¿Quieres que te prepare algo para
desayunar?
-
No es necesario.
Sabía que seria lo más fácil, pero también sabia
que no cerraría el pico el tiempo que estuviera junto a mi, así que me limite a
desayunar una caja de cereal y 7 naranjas. Una vez acabado mi desayuno me dirigí
a la sala donde Trunks, Krillin y Yamcha veían plácidamente televisión.
-
No cabe duda que ninguno de
ustedes esta preocupado por la pelea – mi sarcasmo llamo su atención haciéndoles
voltear hacia mi.
-
Buenos días papa.
-
No es lo que crees Vegeta – respondió
Krillin- lo que pasa es que Cell dijo que quizá nos avisaría por televisión.
-
Bah, tonterías.
-
Es cierto papa, eso fue lo que
dijo ese monstruo.
-
Bueno yo voy a ponerme de acuerdo
con el plan que tiene el maestro Roshi, avísenme si aparece Cell- anuncio
Yamcha.
-
Es buena idea – agrego Krillin- ¿Qué
te parece si entrenamos un poco?
-
Me parece bien.
-
Hacia mucho que no luchábamos tú y
yo, además ya no puedo esperar a que empiece el torneo y si se respetan las
reglas no tentre que preocuparme por morir.
-
¡Ustedes no participaran en el
torneo! – les interrumpi- conmigo es mas que suficiente, no permitiré que ni
Kakarotto ni nadie interfiera en mi torneo.
-
No digas tonterías, si la vez
pasada Cell te derroto en un abrir y cerrar de ojos – replico Yamcha.
-
¿Qué dijiste? Si entro una vez mas
en esa habitación me convertiré en el hombre más fuerte del universo; esta
pelea no es para ustedes gusanos.
-
¡¿Gusanos?!
-
¿A caso no te lavaste bien los oídos…
gusano?
-
¡Papa!
La habitación quedo en completo silencio, la tensión
en el aire crecía con cada segundo que pasaba, sentía la frustración de Yamcha acumulándose
en su puño – eso es sabandija intenta golpearme y te hare pedazos – pensaba ansias.
Pero de pronto el sonido de una puerta al abrirse rompió la atmosfera.
-
¡¿Dónde esta?! – era Bulma que
entraba corriendo con el pequeño Trunks en brazos- ¡Trunks!
Corrió como un bólido hacia nosotros y sorprendentemente
nos arrolló como un toro, a veces me sorprende lo fuerte que puede ser esta
mujer; se detuvo frente a Trunks quien miraba atónito la escena.
-
Que bueno que estas aquí – decía mientras
le examinaba por todos lados – menos mal que no te paso nada, Piccoro me dijo
que ese monstruo no te había matado, pero estaba muy preocupada.
-
Di, discúlpame por preocuparte.
-
No vuelvas a preocuparme así hijo.
-
Si.
Él bebe Trunks jalo de los cabellos de su versión
adulta, lo que provoco la risa de todos, debo admitir que la extraña escena era
divertida.
-
¡Y tu Vegeta! – Bramo mi nombre.
-
¿Yo que?
-
¡¿Por qué demonios golpeaste a
nuestro hijo?!
-
¡hug! ¿pero como es que lo?
-
¡Piccoro me lo conto todo! Aun no
puedo creer que hayas ayudado a ese monstruo a perfeccionar su cuerpo.
-
¡Calla mujer! Jamás entenderías
las razones de un guerrero saiyajin.
-
Bien merecida te tienes la paliza
que Cell te dio.
-
¡Argh!
-
Ya no importa Bulma, ya lo pasado,
pasado – argumento Krillin.
-
¡Y no se me olvida que tú
desperdiciaste mi control para detener a los androides!
-
¡Ah!
-
¡¿Tienes idea de lo difícil que
fue construirlo?!
-
¡AAAHHH!
Un alarido acallo la discusión. El maestro
Roshi que estaba frente al televisor estaba completamente pasmado; El sonriente
rostro de Cell estaba en la pantalla.
Buenos, creo que continuare mañana, será mejor
que me vaya a la cama, además no quiero que Bulma se ponga a sermonearme otra
vez por lo tarde que me he estado durmiendo últimamente.
6 comentarios:
Qué emoción! Espero ansiosa tu siguiente entrada!!!!
gracias de verdad eres genial para escribir, espero con ansias la siguiente entrada.
eres muy bueno sigue asi me encanta lo que escribes :D
voy leyendo y escucho la voz de vegeta en mi cabeza.... rdo no cualquiera lo logra en serio rifas demasiadooooo
¿Para cuándo publicas la siguiente entrada?
Ya me muero de ansias por seguir leyendo!
Sube la otra entrada plis :D que esta muy interesante :>
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