lunes, 18 de mayo de 2009

El cine de las masas ( al pueblo pan y circo)

Esperando que todos hayan tenido un buen inicio de semana. Hoy en el segmento de “El cine…”hablare de el cine comercial.
Una de las preguntas más recurrentes entre los amantes de cine de todo tipo es el ¿Por qué la gente acude con frecuencia al cine comercial?
¿Será el cansancio cotidiano, que todos tenemos por nuestra vida llena de limitantes, que vamos a encerrarnos en una caja a que nos cuenten sueños? Ó tal vez ¿ha sido por que nunca nos han enseñado el valor de apreciación de las cosas y no sabemos distinguir entre cualidad y cuantidad?

Si bien, Apreciación es una palabra un poco ignorada para la mayoría, pues Apreciación según el diccionario de La Real Academia Española es: determinación aproximada del valor de algo ó Aumento del valor o cotización de una moneda respecto a otra, cabe destacar que también existe otra apreciación, la cual se conoce como Apreciación Artística. Por estos días es común que llamamos Arte a todo acto humano en el que por medio de materia, sonidos o conceptos; se expresan , manifiestan o crean ideas y sentimientos. Existen muchas cintas cinematográficas llamadas como tal, Artísticas, pero no apreciadas ni sentidas como “arte” . Sin embargo dichas cintas son nominadas a algún premio Académico, partiendo del sólo hecho de su valor cuantitativo y, rara vez, por su entrega cualitativa. En ese punto es bueno recalcar que la segunda definición, antes mencionada, de apreciación es muy usada en estas últimas décadas en el mundo artístico. Esto no sólo pasa en el cine sino en todo tipo de situaciones.
Hay quienes dicen que el cine de arte y el cine comercial difieren de las temáticas pero puedo decir que no es cierto, pues las temáticas no tienen mucho que ver con lo que quieres que tus bolsillos expresen.

El cine comercial puede ser un buen producto: Tiene el inmenso poder de llegar a un coeficiente tan variado como extenso. No imagino al séptimo arte sin películas como Lo que el viento se llevó, Cantando bajo la lluvia, E.T. o Titanic. Además, opina que este tipo de oferta tiene una influencia positiva en los espectadores: El cine comercial es Hollywood, una fábrica de sueños. Gracias a este tipo de cine uno puede embarcarse en un mundo de fantasía, participar de historias. No en vano el espectador habla con pasión de las estrellas de cine al igual que de sus películas
En definitiva, juzgar al cine comercial como un mal necesario, puede ser un poco exagerado, la calidad y el poder de convocatoria son cualidades independientes. Que un producto sea o no bueno es el fruto de un largo proceso de decisiones estéticas. Que una película sea o no comercial depende de su habilidad para adscribirse, o no, a determinados esquemas narrativos, a las apetencias de un sector del mercado y a la habilidad de su estrategia promocional.
Pero dinos ¿Cuál prefieres tú?

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