domingo, 17 de abril de 2011

Las Memorias de Vegeta (Entrada 22)



1 de Julio 791 11:25am

El extraño ki que percibía era una mezcla del ki de Kakarotto, Piccoro y mió, también podía sentir la energía de Freezer y su padre además de la de otros individuos. Por un momento pensé que me equivocaba, pero al concentrarme me di cuenta de que provenían del mismo sujeto, era una locura, era imposible. Sin dudarlo me transforme en súper saiyajin y volé a toda mi velocidad, Piccoro y la otra sabandija se encontraban muy lejos, así que no podía escatimar energía si quería averiguar que es lo que estaba ocurriendo. En recorrí kilómetros y atravesé una tormenta eléctrica - ¿Qué demonios esta sucediendo? – me pregunte a mi mismo mientras esquivaba los relámpagos.


No pasaron mas de 10 minutos cuando ya me aproximaba al lugar, entonces pude sentir dos ki con una fuerza tremenda, uno comenzaba a desvanecerse mientras que el otro seguía inmóvil, y era obvio que no pertenecía a los androides, ¿Quién era? ¿Quién podía tener semejante poder capaz de igualarse al de un súper saiyajin? De repente me detuve al sentir la inmensa energía expelida por Piccoro, no podía ser posible, pero me sorprendí tanto que incluso perdí mi transformación. Entonces pareció percatarse  de mi presencia y me miro, Trunks y Krilin que se encontraban ahí  me miraron también.

-         ¡Confiesa! – le impere al gigante verde - ¿Qué demonios sucedió aquí?
-         Percibo que Ten Shin Han se dirige hacia acá, una ves que llegue les contare todo. Respondió tranquilamente mientras me daba la espalda.
-         Permíteme preguntarte algo antes de eso, ¿Eres de verdad tu Priccoro? ¿Cómo obtuviste ese poder de pelea tan repentinamente?
-        
-         Uhrrn ¡Responde!
-         Piccoro se ha…- comenzó a decir Trunks que estaba detrás mío – Piccoro se ha fusionado nuevamente con Kami Sama del Templo Sagrado.
-         ¿Que? ¿Se fusionaron? ¿Cómo es posible? – me sentía un idiota, primero la aparición de ese extraño ki y ahora esto, era absurdo. Y solo con hacer eso aumento tanto su poder que sentí que superaba el mió, pero eso era imposible ya que yo era un saiyajin y el un simple Nameku.
-         Ahí viene es Ten Shin Han- dijo Krilin

Piccoro comenzó a narrarnos lo que había pasado. Cell, un androide creado en secreto por la computadora del Dr. Maki Gero había sido creado usando como base células mías, de Kakarotto y los demás.

-         Desde mi punto de vista es mejor derrotar a Cell mientras no sea tan poderoso como el piensa- dijo Piccoro tajantemente.

¡Ya Basta de bromas, YA BASTA! – Pensaba furico al escuchar toda la historia y sus ideas – esos malditos insectos siempre hacen a un lado la fuerza de los saiyajin sin importarles nada, es irritante, ¿no lo crees… Kakarotto?

Decidieron ir en busca de ese monstruo, mientras Krillin iria a ver como se encontraba Kakarotto.

-         Tienes razón Krilin, si la fuerza de un Super saiyajin no basta para detener esta amenaza, quizás entre todos podamos hacer algo – Agrego Priccoro.
-         ¡Yo lo superare! – Respondí a la pregunta que nadie hizo, no iba a permitir que siguieran subestimándome - ¡superare la fuerza de un súper saiyajin!
-         ¿Que? ¿superar la fuerza de un súper saiyajin? – Pregunto Trunks completamente anonadado.

Era fácil entender su reacción, cuando por primera vez me transforme pese que había obtenido el poder absoluto, que estaba en la cúspide de mis capacidades; pero ahora, habiéndome tropezado con tantos obstáculos me daba cuenta de que no era así. Esos idiotas no tenían ni la más remota idea de la magnitud de mis palabras, pero la mirada en los ojos de Trunks me decía que el si lo comprendía. Sin decir mas partí nuevamente para reiniciar mi entrenamiento.

Sabia que mi objetivo no seria fácil, sobre todo con tampoco tiempo, tratar de incrementar mi fuerza con solo entrenamiento físico no era una opción, lo único que podía hacer era liberar el potencial de la transformación para lograr pelear mas haya de mis limites, entonces mi mejor jugada seria usar Koa (ver apéndice) una técnica de concentración que permitía pelear durante días sin agotarse manteniéndose vigoroso sin la necesidad de comer, beber o dormir; cuando estuve en Namekusei abuse de esta técnica mientras recorría el planeta en busca de las esferas del dragón, pero en esta ocasión la usaría para enfocar mis pensamientos en mi búsqueda para superar mis limites.

Pronto encontré una zona montañosa, era perfecto para concentrarme, me pare al filo de la cima, con los cielos abiertos sobre mi, respire profundamente. Entonces, Trunks descendió.

-         Sr. Vege- no… Papa – dijo reuniendo coraje para llamarme de esa manera – Déjame entrenar contigo, se es remotamente posible superar a un súper saiyajin, yo también quiero intentarlo.
-         … - me limite a mirarlo por un momento, ahora que lo miraba con mas calma podía darme cuenta de lo mucho que se parecía a mi, aun cuando el cabello no fuera negro y sus ojos fueran los de su madre, su mirada, su perfil, incluso su leguaje corporal lo identificaba como mió.
-         Por favor papa, prometo no estorbarte.
-         Cierra la boca – le ordene diestras volvía a mirar al cielo – no necesito un compañero para entrenar – no me importa lo que hagas, solo no me molestes.

Confundido, el chico guardo silencio y se sentó en una roca a unos metros de mis. Durante tres días permanecí de en el mismo lugar, cada tanto Trunks usaba una capsula para sacar un refrigerador en el cual tenia provisiones, incluso una bolsa de dormir, era obvio que desconociendo las enseñanzas saiyajin pudiera soportar tanto tiempo despierto y sin alimento, mas de una vez me intento convidarme de su comida, pero no me moleste en darle una respuesta.

Demonios, ya me esta dando hambre, es una lastima que el Koa solo te permita resistir el hambre, pero aun así si no te concentras no puedes tolerarla. Continuare después de una buena comida y una siesta.

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